Uno de los partidos más calientes de las últimas semanas en el Fútbol Profesional Colombiano fue el que se dio el pasado lunes en la ciudad de Medellín entre Atlético Nacional y Millonarios. Ambos equipos se jugaban sus opciones de llegar a la final, dejando como resultado la sorprendente victoria del club bogotano por la mínima diferencia con gol de Radamel Falcao García.
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Después del pitazo final, surgió la mancha que opacó el juego, y es que varios jugadores del equipo local se abalanzaron sobre los visitantes a golpes por una presunta provocación, dejando bastante mal parado el espectáculo y sembrando una duda entre los seguidores por las sanciones que podrían caer tras el juego.
Asimismo, antes del partido ya se vivían hechos de violencia a las afueras en contra del plantel embajador, teniendo en cuenta que el bus en el que se transportaba la delegación del equipo fue atacado a piedra por los barristas locales, quienes no han recibido ningún tipo de castigo por lo sucedido, y la Dimayor ha hecho caso omiso a los pedidos de que se identifiquen y eliminen a los violentos del fútbol.
Ahora, en las últimas horas, parece que la violencia llegó hasta Bogotá, pues otro grupo de hinchas de Atlético Nacional atacó a varios seguidores que disfrutaban del partido en un bar de la localidad de Bosa, en Bogotá. Allí se observa como llegan los desadaptados con piedras y machetes, obligando a los aficionados a entrar al recinto y dejar sus objetos en la calle.
Los sujetos al ver esto se llevan una bicicleta y rompen los vidrios del establecimiento, sembrando una fuerte preocupación por la cantidad de casos de violencia dentro del FPC que se han vuelto a presentar por culpa de las barras, en especial, en este tipo de clásicos donde se pierde el control de los hinchas.